martes, 10 de abril de 2007

¡Paradigmas!

Etimológicamente Paradigma es MODELO, muchos de nosotros tenemos modelos muy arraigados en nuestro ser y creemos fielmente en ellos y las consideramos tan verdaderos como que el sol sale cada día para todos, eso es un paradigma, es decir, un creencia que nos sirve como marco de referencia para actuar en determinada forma.
Es interesante toda esta situación, pues pudimos apreciar en el contexto global de nuestra clase que muchos no saben o no pueden aún identificarse con un paradigma específico, siendo que en nuestra vida diaria estamos llenos de ellos. ¿Será que no hay un paradigma perfecto que englobe todas nuestras inquietudes? ¿Será que para ser un buen profesor se debe ser una mutación extraña, medio positivista, medio socio-critico y lo que resta interpretativo?
Bueno, extrayendo de cada uno de ellos algo, quizás podríamos formar el paradigma perfecto que guíe nuestro que hacer educativo. Escuché muchas opiniones, unas que decían que sería bueno implantar el positivismo, que el positivismo la lleva ¿ Pero que sacamos con aquello, no se supone que debemos romper el antiguo esquema y formar jóvenes capaces, críticos y responsables de su propio aprendizaje? ¿Y será así si vemos a los estudiantes como meros receptores? Sí, muchos estarán de acuerdo con ese planteamiento y pensarán que la disciplina estricta y la dominación absoluta del profesor es la clave para una buena educación y que la "educación bancaria” de la que habla Paulo Freire (1974) –en la que el educador era el que tenía la cabeza llena y el alumno el que la tenía vacía, y la educación consistía en el trasvase de esos saberes­– es aplicable para algunos que se posesionarán del título de profesor y se creerán omnipotentes frente a sus alumnos, esto es algo errado a mi manera de ver y no se justifica bajo ningun punto de vista, si lo deceamos es un cambio en la educación.
Otros quizas opten por otros paradigmas y no necesariamente por aquellos que estudiamos en clases, yo en lo personal me identifico mucho con el paradigma interpretativo y además con el Humanista.
¿En que consite este paradigama? está basado en la Educación Humanista es aquella en la cual todas las facetas del proceso de desarrollo humano dan un énfasis especial a la unicidad de cada ser humano, tendencia natural hacia su autorrealización, libertad y autodeterminación, integración de los aspec­tos cognoscitivos con el área afectiva, conciencia y apertura solidaria con los demás seres humanos, capacidad de originalidad y creatividad, y jerarquía de valores y dignidad personales, esto es básicamente, y todo esto deben ser las metas a las que deben orientarse los profesores teniendo en cuenta que estamos sumergidos en un mundo llenos de tecnología en la cual los alumnos tiene acceso a miles de conocimientos y que mecanizan a las personas.
Y ¿Cuáles son las características fundamentales de esta Educación Humanista?
1. Fidelidad a "lo humano" y a "todo lo humano". Éste es el lema y distintivo, lo que mejor identifica y sintetiza la orientación humanista, es decir, que valoriza al ser humano y pontencializa el poder ser.
2. Desarrollo "personal". Cada persona está constituida por una realidad genética y constitu­cional muy peculiar y única. por lo tanto la educación debe estar conciente de ello y trabajar los curriculum de forma de respetar esas diferencias.
3. Importancia del área afectiva.
4. Tendencia "natural" hacia la autorrealización. El ser humano muestra una capacidad, y también un deseo, de desarro­llar sus potencialidades.
5. Conducta creadora. Es plenamente natural al ser humano el comportarse en forma crea­dora.
"La Educación Humanista, entendida y practicada con esta riqueza de la dotación del ser humano, será capaz de formar las generaciones del futuro, mejor equipadas en sus cabezas y más honestamente sensibilizadas en sus corazones".
Como vemos podemos tener muchas opciones ésta es solo una de ellas, no hay un sólo paradigma bueno, hay muchos, y quizas sacando un pedacito de cada uno de ellos se pueda realizar el paradigma perfecto que logre sacar a la educación chilena adelante. Es por eso que los invito a cada uno de ustedes a analizarse y preguntarse que es lo que quieren como futuros profesores para sus alumnos, que clase de profesor quieren ser, y desde allí trabajar en el mejor paradigma, el que fundamente y guíe vuestra labor como educador, es importantísimo pues será la fuerza que nos motivará cada día para levantarnos temprano y llegar al aula con 45 muchachos de los cuales solo un porcentaje muy pequeño quiere aprender, lo que nos moverá a trabajar por un sueldo no muy bueno y lo que al final de nuestra jornada nos llenará de satisfacción.
Vamos compañeros que se puede, somos una nueva generación de futuros profesores los que le cambiarán la cara a la educación chilena, sera difícil, pero no imposible, quizás uno no lo pueda hacer, pero 45, 50, y así los que se vayan sumando después podremos hacerlo y lograr de una vez por todas que Chile sea un país bien educado.